Continuación de un párrafo de Miguel Delibes, para el Facebook de una biblioteca. Texto corto de 100 palabras




Créeme que sin beber, y con cuerpo y cabeza encerrados entre cuatro paredes, en ocasiones la pared que más barata has podido comprar, el tiempo no pasa; el reloj ha muerto. No tienes más compañero que esa cerveza barata de supermercado, pues en los tiempos que corren en los que la seguridad está por encima de la libertad, el placer y compañía del alcohol es el único y más fiel compañero que podrás encontrar, y su lealtad dura lo que dura el recuerdo del último beso de un antiguo amante, tan enlatado e insulso como lo que estás bebiendo.

Relato desde una foto




Los ojos se clavaron en algo. Algo que está fuera de éste encuadre, algo que él veía, pero que nadie sabe ¿Qué es lo que mira tan insitentemente el hombre? Mirada altiva, oscura, que hiela la sangre del otro cuando es el otro el que mira. 

Las pupilas se dilatan, los rasgos se enfurecen... pero ese hombre no mira a nada, a nadie: solo a la muerte.

Muerte que acecha entre los árboles malditos, fundidos en claroscuros deprimentes. Él la mira con firmeza, la enfrenta, la desafía. Ésta instantánea es lo que las cuencas vacías de la parca observan de lejos, pues no se atreve a estar cerca. 

Pues todavía su hora no ha llegado, pero ella está presente, vigilando con cautela, pues vueltas da la vida y su día podría ser cualquiera. Pero ella tiene miedo, miedo de esos ojos que se clavan en ella y espera con paciencia que un día se cierren para poder cruzar triunfante la laguna Estigia con su premio: el único hombre que no tuvo miedo de mirarla a los ojos.

Una canción

La última palabra de ésta canción es la primera de la mañana.
Y si esa palabra es triste,
no quisiera separarme de las sábanas.
En cambio, si es alegre, no quiero tocarlas.

Muy a menudo ¡pérfida! , ¡maldita! , es triste;
mis sábanas se humedecen con lágrimas tristes;
se empaña la tristeza con más tristeza.
Tristeza sobre tristeza.
Decepción.

Cuando esa palabra es ambigua
puedo  saber combinar risa y llanto,
disfrazar pena de alegría,
abrazar y zozobrar,
sonreir sin pasión. Por cortesía.

Canción agridulce con un sólo de guitarra que no llega al corazón,
tonos huecos, riffs descafeinados;
platos rígidos; voz muda:
Vacía ¡Tan vacía!
La música murió.